EL TERRITORIO INDÍGENA EN COLOMBIA
Guadalupe Espinoza Sauceda
La historia de los pueblos indígenas en Colombia, no es distinta de la que se ha vivido en el resto del continente, marcada por el proceso de conquista y colonización europea, los pueblos indígenas fueron discriminados, excluidos, minimizados y desposeídos de sus territorios ancestrales.
Para los pueblos indígenas el territorio es el centro del espacio de vida y desarrollo cultural. Se dan cuenta que hay distintas verdades y diversas miradas. Mientras la cultura dominante habla de desarrollo, los indígenas hablan de planes de vida.
Hay 47 millones de habitantes colombianos (de los cuales menos de 3 millones son indígenas). Hay 96 pueblos indígenas y 116 lenguas indígenas. El gobierno ha aplicado una política de exterminio. La iglesia católica habla del Encuentro de dos mundos, aunque para los indígenas no ha sido realmente un encuentro sino una invasión, un saqueo, un despojo de sus tierras. La invasión sigue en nuestros tiempos.
El 25% de la población de Colombia es negra. José Santos del movimiento afro por su parte dijo que Colombia es racista, que el conflicto más fuerte de su país no es el armado sino el social.
Respecto al régimen de propiedad de la tierra, en Colombia es a partir de la Constitución de 1991 y del desarrollo jurisprudencial de la Corte Constitucional Colombiana, que comienza a darse un reconocimiento de las tierras indígenas, principalmente a partir de la figura de los resguardos indígenas, sin embargo, los resguardos indígenas, son sólo una parte de los territorios indígenas, que les ha reconocido legalmente el Estado, excluyendo algunos territorios y ocupaciones tradicionales que los pueblos indígenas reivindican.
El Resguardo, es la figura territorial y jurídica para los pueblos indígenas de Colombia. Los Consejos Comunitarios, es la tierra de los afrocolombianos y Las Zonas de Reserva es el área territorial de los campesinos.
Las reservas campesinas se instauraron en 1994, como un instrumento de reforma agraria. En 1996 se reglamenta la Ley 160, que es la Ley de Tierras de Colombia, y en 1998 se lanza el plan piloto por el Instituto Colombiano de Desarrollo Rural (INCODER). Actualmente hay únicamente 6 reservas campesinas, con un total de 811,000 hectáreas. Lo que se plantea es el ejercicio de la territorialidad, el concepto de comunidad, ser interlocutor con el Estado, el manejo del desarrollo productivo y la autonomía.
En el reordenamiento territorial son pocas las familias que tienen la propiedad de la tierra. Los resguardos en voz de los pueblos indígenas son pecas- dicen-, y para su restitución también se están basando en las Leyes de Indias. El tema de la autonomía también les llama la atención y los pone a pensar. Hablan de un Derecho propio, que viene siendo el derecho indígena.
En Colombia hay 8 millones de desplazados de un total de 45 millones de colombianos. Hoy está en disputa la devolución de las tierras. La reforma agraria se dio por la vía de los hechos, aunque desde mi punto de vista en Colombia no ha habido reforma agraria, al contrario, hay grandes acaparadores de tierra y grandes terratenientes. Hay una Ley de Víctimas y Restitución de Tierras para los desplazados.
Los pueblos indígenas se sienten excluidos, y hacen suyo el discurso de los zapatistas en México que las autoridades deben mandar obedeciendo. Los cabildos no son propios de la cultura indígena colombiana, pero se los han apropiado y hecho suyos.
Tierra, territorios y soberanía son conceptos que están en la agenda del movimiento social colombiano y en los Diálogos de La Habana.
Durante el viaje de estudios a Colombia de la VII Generación del Doctorado en Desarrollo Rural de la UAM-Xochimilco, pudimos visitar y entrevistarnos con líderes y representantes de la Región del Cauca.
De 3 millones de hectáreas de tierra en el Cauca, 650 mil son tierra indígena. Hoy los grandes terratenientes han vendido a las transnacionales, quienes impulsan megaproyectos en las regiones indígenas. Los pueblos indígenas, en especial de la región del Cauca, se han hecho fuertes en los resguardos y en las asociaciones de cabildos de 1994.
El Consejo Regional Indígena del Cauca (CRIC) ha puesto énfasis en la recuperación de las tierras (territorios), tratando de recuperar lo perdido y ampliar los resguardos, le apuesta a la conciencia, la organización y la interlocución con el gobierno, van por el diálogo, saben que así tendrá que resolverse el problema que enfrentan. Buscan los territorios colectivos, aunque dentro del movimiento hay unos que se refieren a territorios ancestrales y otros a tradicionales. No obstante el gobierno colombiano sigue negando los derechos de los pueblos indígenas.
Algo que se recalca mucho en las discusiones entre las organizaciones colombianas es que el conflicto de fondo en Colombia es por la tierra. Los diferentes dirigentes y actores sociales dicen que se requiere de una nueva constituyente, algo similar a lo que se busca en México en estos días. Hay una ebullición social y política en Colombia. Javier Betancourt, uno de los principales dirigentes, refirió que su país está muy desbalanceado en la igualdad social, por eso el sujeto agrario está en la cresta ahora en el movimiento social.
Hay una tensión entre dos modelos: El dominante versus la autodeterminación. En el que el dominante gira bajo los vértices de un triángulo: Desarrollo, Modernidad y Estado-nación, mientas que la segunda sobre: Vida, cambio civilizatorio y autonomía territorial. Llegándose a la conclusión que se requiere una respuesta planetaria, lo que en México los pueblos indígenas le llaman autonomías.