Alarma en reserva de la biosfera de Sian Ka’an: Semarnat retoma evaluación de megaproyecto a cargo de la SEDENA

Felipe Carrillo Puerto, Quintana Roo. 31 de agosto, 2025 – Pobladores y organizaciones ambientales se encuentran en alerta luego de que, el pasado 31 de julio de 2025, la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (SEMARNAT) retomara la evaluación del megaproyecto “Camino Artesanal Puerta al Mar”, el cual fragmentaría la Reserva de la Biosfera de Sian Ka’an para conectar los municipios de Felipe Carrillo Puerto y Vigía Chico.

La SEMARNAT había suspendido el análisis de impacto ambiental en abril pasado por requerir información adicional a la Secretaría de la Defensa Nacional (SEDENA), instancia responsable de la obra. Sin embargo, su reciente reactivación ha generado temor entre comunidades locales sobre la reanudación de las obras, las cuales ponen en riesgo las comunidades y el ecosistema.

El proyecto y sus implicaciones

El proyecto, impulsado por la SEDENA, incluye la construcción de una carretera de 54.6 kilómetros que cruzará los humedales de la reserva. De esta longitud, 22.4 km estarán pavimentados y 32.07 km serán de “camino artesanal”. Además, contempla infraestructura complementaria como un muelle con mirador, un restaurante, un estacionamiento con locales comerciales y una playa artificial, todo ello en áreas de manglar.

A pesar de que el gobierno de Quintana Roo afirma que el proyecto respeta el área natural protegida y que se resolvió un conflicto ejidal, su legalidad y sostenibilidad son fuertemente cuestionadas. Tanto las organizaciones a favor de la protección de la reserva de la Biosfera de Sian Ka’an, la UNESCO y comunidades originarias han señalado la falta de documentación necesaria para una evaluación ambiental completa y transparente.

Falta de estudios y silencio institucional

La SEMARNAT ha sido clara en señalar que el proyecto no cuenta aún con la autorización de impacto ambiental, ni con el permiso de cambio de uso de suelo, requisitos obligatorios establecidos por la Ley General del Equilibrio Ecológico y Protección al Ambiente (LGEEPA). No obstante, los trabajos físicos se retomaron en enero de 2025.

La situación más alarmante recae en la construcción sobre áreas de manglar, un ecosistema vital que actúa como barrera natural contra huracanes, filtro de agua y refugio para cientos de especies. La SEDENA no ha explicado públicamente cómo mitigará el impacto ambiental y, según se reporta, ha dejado sin respuesta solicitudes de información de la UNESCO, organismo que declaró la reserva de Sian Ka’an Patrimonio Mundial de la Humanidad.

Temores comunitarios y especulación de tierras

Para los pobladores de la región, los riesgos van más allá del daño ecológico inmediato, estos temen que el aumento en el tránsito de turistas y embarcaciones afecte la biodiversidad marina, ponga en riesgo sus actividades comunitarias y robo de tierras. Al respecto, organizaciones y defensores del territorio maya advierten que este proyecto facilitaría la entrada de otros megaproyectos turísticos, profundizaría la militarización de la zona y abriría la puerta a la especulación y el acaparamiento de tierras.

La evidencia es clara: no hay forma en que un área natural protegida, decretada como tal por su frágil e invaluable biodiversidad y reconocida como Patrimonio de la Humanidad, pueda ser utilizada para fines turísticos, masivos y megaproyectos sin sufrir un daño irreversible.  La construcción de infraestructura como muelles, y restaurantes en el corazón de los manglares de Sian Ka’an es ecocidio. Esto muestra, una vez más, el modelo desarrollista turístico, depredador y extractivista al que el gobierno mexicano le siguen apostando. Significando un costo real que pagarán las comunidades locales.